La motivación desde la virtualidad para implementar el currículo puede ser un reto significativo tanto para administradores, docentes, familias y niños en general. Definitivamente lo que estamos viviendo llegó para enseñarnos de lo que sí somos capaces. Como profesional en el campo educativo me di a la tarea de aprender más sobre este tópico hasta lo puede ver desde la perspectiva global por medio de la conferencia The Play First Summit 2020. Han sido muchos los mensajes de familias y educadores expresando su preocupación por las largas horas frente a la pantalla y la estructura establecida como si estuviesen en la escuela. Y el primer mensaje de Sally Haughey, especialista en niñez temprana y educación a distancia para adultos establece que lo primero es que “Jamás pensemos en imitar lo que ocurre en el salón desde la virtualidad”.
Por tanto, partiendo de la información levantada hasta el momento por los expertos, este proceso requiere de tres elementos escenciales, estructura, empatía y mesura: estructura Armoniosa entre los intereses de los administradores, docentes, familias y niños. Definitivamente no se puede imitar lo que ocurre en el salón pero si identificar esos modelos educativos sociales que apoyen el replanteamiento curricular y que se cumplan los mismos objetivos. Modelos tales como: Inquirir, Aprendizaje Basado en Proyectos, Aprendizaje Basado en Problemas y Vida Real, son algunos de ellos. Empatía ante un proceso del cual todos estamos atendiendo de la mejor manera que podemos con los recursos que tenemos. Entendiendo que estos primeros encuentros requerirán: conectar y vincularse por medio del movimiento, la risa y el aliento. Conectar y apoyar al docente y a la familia es esencial. La familia será el equipo que apoyará a la escuela en este camino, que no será eterno. Todo esto se logra desde el cerebro bondadoso: "gracias", "sabía que podía contar contigo", "podemos hacerlo", "te escucho", "veo tu esfuerzo", "esto es lo que podemos hacer", son algunas de las frases de aliento para las familias y comunidad escolar en general.
Y por último mesura, pues el cerebro necesita tiempo y espacio para captar de manera mutisensorial la información. Donde se activen momentos de atención balanceados con los de no atención a la pantalla de manera que pueda apoyar el procesamiento de la nueva información. Tener a un niño en bloques que completen 5 a 8 horas es inaceptable, ni siquiera un adulto lo puede lograr todos los días con efectividad y un buen rendimiento. Aunque el cerebro de adapta, el niño están en crecimiento y desarrollo y necesita participar de encuentros productivos y moderados. Donde menos, siempre será más. Los músculos oculares se inflaman, aumenta la química del cuerpo que genera estrés y se activa el cerebro de la sobrevivencia. Entonces los niños se van, se paralizan o responden agresivamente. Esto mientras les exigimos mucho más de que nos pueden dar pos sus etapa de maduración. Entonces les invito a replantear su currículo virtual donde del aliento, del humor y del movimiento, formas en lo que el cerebro aprende. Pues “No se trata de cuando sabes, sino de cuanto puedes hacer con lo que sabes”. Puedes hacerlo, eres capaz y eres suficiente.
Si deseas aprender sobre como hacer del espacio virtual uno divertido, de aprendizaje y de apoyo para las familias puede comunicarse a ieconuco@gmail.com
Recursos para aprender más:
The Play First Summit Conference 2020 https://usplaycoalition.org/playconference2020
Teaching Virtually with Young Children https://go.fairydustteaching.com/teachingvirtually/
BrainConnection https://www.facebook.com/brainconnectionspr/
